Crónica

Meylin Su.
Karla Vivanco.

Una de las zonas más frías de Lima

Lucha por sobrevivir en Ticlio Chico

A 200 metros sobre el nivel del mar, se encuentra en el distrito de Villa María del Triunfo, Ticlio Chico, un asentamiento humano cubierto por la neblina, todos los inviernos y en el que se vive una lucha constante para combatir la oleada intensa de frío.

Ticlio chico, le colocaron ese sobrenombre debido al parecido que existe entre el asentamiento humano 12 de junio de Villa Maria del Triunfo y el lugar Ticlio ubicado en la provincia de Huarochirí, en el cual se experimenta una fuerte ola de frío en la época de invierno. Este asentamiento está ubicado en la parte más alta de Villa Maria del Triunfo. A pesar de estar en Lima, el frió en este lugar es muy intenso.

En el día la temperatura bordea los 10 grados centígrados, pero por las noches las temperaturas descienden, este año las temperaturas llegaron hasta los 5 grados centrígrados. Es así que dormir, se convierte en una tarea difícil. No se consigue descansar adecuadamente, pues el sonido de tus dientes temblando te lo impiden. Pero el cansancio de todo el trabajo del día hace que olvides la oleada de frío y concilies el sueño.

Una noche en el lugar te basta para amar de por vida a tu caliente cama en tu acogedor hogar. Pues en Ticlio chico, las casas están improvisadamente construidas con palos, esteras, plásticos, calamina, etc., los cuales no son materiales muy resistentes a las bajas temperaturas que se experimentan, ni para las lluvias que cubren todo Lima en la temporada de invierno.

Siempre con la angustia dibujada en la cara, los hombres de las familias salen a las 5 o 6 de la mañana a trabajar, esperando tener mejor suerte. Se abrigan lo mejor que pueden, se ponen las casacas más grandes que tienen, pero con lo gastadas que están, no los protegen mucho. La mayoría son recolectores de botellas de plástico, papeles, cobradores y chóferes de transporte público. Los trabajadores no regresan hasta muy tarde en horas de la noche. La mayoría de las mujeres pasan todo el día haciendo las labores de la casa, casi ninguna trabaja, debido a que tienen varios niños para cuidar. Aunque siempre hay hijo o hija mayor que las ayuda con los deberes cotidianos del hogar y un bebé de pocos meses de nacido.

Una vez levantadas, las mujeres empiezan el día preocupadas por preparar el desayuno, le sigue la limpieza y alrededor de las 11 o 12 de la mañana van al mercado que está a 10 minutos caminando. Es casi un suplicio tener que caminar esta distancia, con el frió como incondicional acompañante. Al dar cada paso sientes que el viento te corta el rostro y te la impresión que todos los huesos de tu cuerpo se quedan estáticos. Sin embargo, estas valientes mujeres han tenido que adaptarse al descomunal frío de Ticlio Chico, ellas sólo llevan unos pantalones, un polo y una chompa desgastada.

Al llegar al mercado, comienzan con las compras del día. Tienen que hacer malabares para poder comprar todo lo necesario para la comida del día y que alcance para toda la familia completa. El promedio que casi todas tiene de presupuesto es sólo 8 nuevos soles y las más afortunadas llevan 10 o 12, pero en el peor de los casos 3 o 4 nuevos soles. Una vez que llegan buscan lo más barato, se puede decir que se han vuelto expertas en el regateo, pues tienen que regatear todo lo que puedan para que les alcance. Como casi siempre van acompañadas entre vecinas al mercado, regresan a sus casas contándose, cual de los niños está enfermo, cual está cada vez peor y lamentándose que no les alcanza el dinero para las medicinas tan caras, en torno a esos tres temas se mantienen las charlas. Cuando llegan se despiden con la promesa de reunirse a la hora de terminar sus labores. Cada una se va a su casa y tienen que cocinar, limpiar, atienden a los hijos y algunas realizan tejidos o lavan ropa para otras personas. Bordeando las 5 de la tarde, salen a las puertas de sus casas, esta la única distracción que tienen durante el día.

Llegan las 6:30 y cada una vuelve a su pequeño hogar para alistar a los más chicos para que se vallan a dormir, les ponen polo tras polo una chompa y una casaca, dos pantalones y un gorrito, en un intento para que no vayan a enfermarse y los que ya están en enfermo para que no se enfermen. En algunos casos comen en la cena lo mismo del almuerzo, en otros solamente te con pan y en el peor no hay nada.

Todos ya listos para dormir, todos en un mismo cuarto con dos o tres camas y los hijos duermen juntos en una cama y los padres en otra. Debido a la falta de dinero no cuentan con muchos cobertores, así que para aminorar el frió las mamás han cocido un plástico al cobertor, eso ayuda mucho, el plástico los calienta y apacigua en algo el brutal frío. Los más pequeños se duermen, la noche termina cuando el esposo llega cena y todos a dormir.

Esto es la parte más difícil, los niños durante la noche, tosen, se despiertan y lloran, otros se ahogan porque no pueden respirar, los padres de familia acuden de inmediato al centro de salud con lo poco de dinero que papá trajo a casa, los más grandecitos también están mal pero ellos solo toman unas cuantas pastillas, medicamentos genéricos los más baratos que han podido sortear

TOMAR CONCIENCIA
Esta es la vida cotidiana en el Asentamiento humano 12 de Junio, más conocido como Ticlio Chico. Y para hacer más difícil la lucha por sobrevivir de estos pobladores. No sólo tienen que combatir con la oleada de frío, sino que todavía no se han implementado todos los servicios básicos correspondientes, todavía no cuentan con agua y desagüe. La cisterna sube todos los días y llena los envases de las personas que puedan pagar por ello, el costo de cada bidón depende del tamaño, el precio va desde 1.70 soles a 2.20 nuevos soles, por el poco dinero con el que cuentan las familias, no pueden comprar bidones todos los días, y eso hace que se controle de una manera exhaustiva el uso del agua, esto genera mucha impotencia entre los pobladores pues el agua es insuficiente.

Sin embargo, no sólo sufren infecciones respiratorias, neumonía, resfríos, gripe, faringe amigdalitis, entre otros. Aquí el agua no cumple su función de fuente de vida, sino la función de conductor de más enfermedades como diarrea, cólera, hepatitis, paludismo, etc.

ESTAR ALERTAS
Durante la temporada de frío en los distritos de Lima se ha reportado un total de tres mil 106 casos de neumonía, 625 casos menos que en el 2007. Según el último reporte de la Dirección General de Epidemiología del Minsa en Lima han fallecido nueve menores de cinco años a causa de la neumonía, 13 casos menos que el año pasado.

Según el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), la carencia de este recurso y la ausencia de infraestructura de saneamiento produjeron un 88% de las muertes por enfermedades diarreicas en el 2008, alcanzando la penosa cifra 5 000 casos al día.

Mientras que en nuestro país, son cerca de 12 millones de personas que no tienen el servicio de agua y saneamiento, estando más vulnerables a enfermedades, los más afectados son los niños y ancianos.

LLAMADO DE AYUDA
Tenemos cifras y más cifras que cada año nos advierten la alarmante situación en la que vive el Asentamiento Humano Villa María del Triunfo, pero nunca se puede lograr, antes de la temporada de invierno, que los pobladores de dicha zona tengan las condiciones necesarias para poder soportar las bajas temperaturas que este año descendieron hasta los 5 grados centígrados.

Este año el Ministerio de Salud (MINSA) realizó campañas de Salubridad, los meses de julio y agosto, logrando beneficiar a dos mil niños y adultos mayores. Todos tuvieron acceso a control y diagnóstico de infecciones respiratorias, medicación gratuita y la inclusión al Seguro Integral de Salud (SIS). Esta campaña contó con la participación de 10 médicos, enfermeras y técnicos. Que desempeñaron sus labores en 10 carpas de atención instaladas en la losa deportiva de Ticlio Chico.

Los pobladores agradecen siempre el apoyo brindado, pues con los escasos recursos que tienen no pueden cubrir como quisieran todas las debidas condiciones de vida que debe tener sus familias.

Sin embargo, creen que el Trabajo en conjunto del Estado Peruano se debe realizar durante todo el año, no sólo cuando comienzan a elevarse las cifras de pobladores afectados. Se debe implementar la construcción de viviendas de material noble, para protegerlos del frío y acelerar la implementación del servicio de agua y desagüe, ya que el asentamiento 12 de Junio se ha convertido en el piloto 310 del proyecto “Agua para Todos”.
Ayudemos juntos a construir mejores futuros, demos un abrigo por una sonrisa, evitemos que en pleno 2009 muchos peruanos mueran por las bajas temperaturas. Ayudemos todos, para evitar que nuestros niños de Ticlio Chico sientan frío.